La calidad y renombre de la cadena de hoteles Meliá está por encima de toda discusión, igual que el prestigio de Punta Cana como uno de los mejores destinos del caribe. Por ello, una estancia en el Meliá Caribe Tropical puede convertirse en una experiencia irrepetible.
Los folletos turísticos de las agencias nos suelen mostrar fotos de hoteles paradisíacos que a veces no se corresponden con la realidad y acaban decepcionando al turista. En este caso pasa lo contrario: el folleto se queda corto.
Además, como es habitual en el Caribe, la atención del personal es inmejorable. El cliente del hotel es tratado con extrema amabilidad y atención, sea cual sea el modo que haya elegido para pasar sus vacaciones. Uno puede viajar a Punta Cana para disfrutar solo, en pareja, con amigos o en familia. Hay opciones para todos los gustos
Las instalaciones del hotel son espectaculares. Entre los servicios gratuitos, podremos utilizar siete piscinas de diseño libre y en forma de lago con sombrillas y tumbonas, donde descansar mientras disfruta de un algún delicioso cóctel caribeño. Si se busca algún entretenimiento más activo, hay ocho pistas de tenis iluminadas y un profesor a disposición de cualquiera que quiera iniciarse en este deporte o mejorar su técnica. Para los niños hay un amplio complejo de juegos donde se recrea la ciudad de los Picapiedra.
El Meliá Caribe Tropical también cuenta con un elegante Casino que propone diferentes juegos de mesa y las tradicionales máquinas para monedas. Dentro del recinto del hotel es posible encontrar también tiendas comerciales, boutiques y locales para regalos, ideal para comprar souvenirs.
En definitiva, el Meliá Caribe Tropical es un hotel realmente completo y que cuenta con todas los atractivos de unas vacaciones en el Caribe. Buena música, buen humor y el mejor entorno natural para disfrutar de lo mejor de Punta Cana.