A la hora de lanzarse a disfrutar de un crucero solemos prestar mucha atención a las características del barco que nos va a llevar a vivir esta experiencia fantástica y, como es lógico, también los destinos que vamos a visitar. Al existir tantas ofertas y promociones, un crucero es más barato y asequible que nunca apara cualquier clase de viajero, si no estás convencido, basta con ver ofertas de MSC Cruceros para darse cuenta.
Los precios suelen incluir algunos conceptos aparte: tasas, propinas y, obviamente, excursiones. Pero casi nadie va a querer quedarse en el barco cuando llega a puerto (aunque quien quiera puede hacerlo), así que hay que prestar atención a este gasto.
Para qué destinos hay que comprar las excursiones
Lo mejor es planear un poco nuestras visitas en cada una de las escalas. Es posible que puedas ahorrarte comprar las excursiones de visita en algunos puertos en los que nada más bajar del barco nos encontraremos en pleno centro de la ciudad (como ocurre en Ibiza, Nápoles o Niza por ejemplo). Tal vez con nuestra guía, nuestro mapa y el transporte público nos baste.
Pero en otros lugares no vamos a tener más remedio que comprar la excursión. Si se trata de un destino desconocido donde hablan un idioma que no conocemos, esto es más que recomendable, pero también en destinos clásicos: si desembarcamos en Livorno es para visitar Pisa y Florencia; si lo hacemos en Civitacvecchia es para acceder a Roma. ¿Cómo llegar a nuestro destino si no es con una excursión?
De modo que cuenta con las excursiones con un gasto necesario para sacarle todo el jugo a tu viaje. En muchos destinos incluso podrás elegir entre 2 ó 3 opciones, para que cada uno opte por la que más interés le despierta, sin preocuparnos de “perder el barco” o perder el tiempo buscando los lugares que deseamos visitar en cada escala.