¿Qué niño no ha soñado alguna vez con poder viajar alguna vez a Disneyworld? ¿Qué padres no han hecho planes de llevar a sus hijos o se lo han prometido alguna vez? Si al fin nos hemos decidido a viajar al reino de Mickey Mouse, las princesas de cuento y todos los personajes de las películas Disney, la cosa es bastante sencilla. Viajar a Disneyland París resulta mucho más fácil y económico de los que nos pueda parecer a primera vista.
Desde su inauguración en 1992, el parque de atracciones Disney cerca de la capital francesa (EuroDisney) recibe a millones de visitantes cada año. Esta temporada se ha presentado un nuevo show: el Festival de los Momentos Mágicos, con nuevos espectáculos y muchas sorpresas, además de nuevos personajes que se unen al mundo de Disney.
Para vivir nuestra experiencia Disney con más intensidad lo más aconsejable es reservar nuestro alojamiento en uno de los hoteles temáticos en el interior del recinto: Las cabañas de madera de Sequoia Lodge, el hotel de aventureros de Davy Crockett Range, la posada para piratas y marineros de Newport Bay, etc. De este modo la aventura y la diversión no se acabarán en el momento de regresar al hotel a descansar, comer, relajarse y dormir.
El parque se divide en dos grandes áreas, una reservada a las grandes atracciones entre las que destaca la montaña rusa (Rock´n Roller Coaster Aerosmith), y otra donde se vive el verdadero mundo Disney. Son famosos sus desfiles y la presencia de todos los personajes conocemos de las películas. En el Disney Village se ubica además la gran tienda Disney de regalos, auqnue hay muchos otros comercios en la Main Street USA.
Una sugerencia para los padres: Si viajar EuroDisney nos parece una experiencia demasiado “pesada” se puede combinar con una estancia de algunos días en París, un destino maravilloso tanto para viajar en pareja como en familia. Hay que hacer una reunión familiar y llegar a un acuerdo para que grandes y pequeños se lo pasen bien visitando las maravillas de Disneyworld y los encantos de París.