El nombre de Costa del Sol, la hermosa franja litoral mediterránea que se extiende por la provincia de Málaga y parte de la de Cádiz, no le fue puesto por casualidad. Aquí se disfrutan de más de 300 días al año de cielos despejados y temperaturas agradables. Ello, unido a la belleza natural de sus playas y el encanto de las localidades marineras, es lo que la convierte en el lugar favorito de tantos españoles y extranjeros para sus vacaciones.
¿Cómo llegar a la Costa del Sol?
Aunque las conexiones terrestres con el resto de la península son buenas, casi todo el mundo elige como puerta de entrada a la Costa del Sol el aeropuerto de Málaga, uno de los más importantes de España. En sus pistas aterrizan a diario cientos de aviones llegados de toda Europa.
Una de las opciones más económicas y recomendables es Ryanair, que conecta la Costa del Sol con numerosas ciudades españolas (Barcelona, Ibiza, Palma de Mallorca, Santander, Santiago de Compostela, Valencia y Valladolid) y con los principales países europeos y mediterráneos: Alemania, Dinamarca, Eslovaquia, Finlandia, Francia, Holanda, Irlanda, Italia, Marruecos, Noruega, Polonia, Reino Unido o Suecia.
¿Dónde están las mejores playas de la Costa del Sol?
Las hay para todos los gustos, todas con aguas limpias y todos los equipamientos: desde Estepona al oeste hasta Nerja, ya en la frontera con la provincia de Granada. En medio, un catálgo interminable de maravillas a lo largo de la costa de Fuengirola, Málaga, Torremolinos y Marbella.
En todas ellas la oferta hotelera es variada y de gran calidad. También las opciones de practicar deportes náuticos y de disfrutar de la gastronomía y el ambiente nocturno de esta parte de Andalucía.
Lo que no te puedes perder.
Uno de los ritos imprescindibles en tu viaje en la Costa del Sol es comer pescao frito en algún restaurante de playa. Pero también ir un día de compras por Puerto Banús, en Marbella, entre embarcaciones de recreo, tiendas de lujo y terrazas donde se deja ver la jet set. Una visita con glamour.
Tampoco podemos dejar de lado la bella ciudad de Málaga y, si tenemos tiempo, visitar el fantástico Museo Picasso.